Parecería un trabajo difícil realizar el mantenimiento de piscinas de agua salada, pero, afortunadamente, es un proceso relativamente fácil de realizar que no necesita de la asistencia de profesionales. No obstante, esto no significa que no se requiera trabajo, ya que estas piscinas requieren un mantenimiento semanal para que permanezca en condiciones limpias y saludables.
Te recomendamos que vacíes la canasta de la bomba de la piscina y hacer un inventario de la química del agua, así como aspirar y limpiar la misma, pero ¿cómo hacerlo? En este artículo te brindaremos los consejos esenciales para un buen mantenimiento de piscinas de agua salada.
¿Qué químicos se necesitan para el mantenimiento de piscinas de agua salada?
Al estar en exterior, las piscinas de agua salada necesitan para su mantenimiento semanal una serie de químicos y controles para que pueda permanecer limpia, clara y saludable. Esto se logra con los siguientes líquidos y procesos:
- Ácido cianúrico: (entre 30 y 80 ppm): ayuda a evitar la absorción del cloro por los rayos solares.
- Cloro libre (entre 1 y 3 ppm): es el nivel de cloro que queda en el agua después de actuar y tiene una función desinfectante.
- Estabilizador (niveles de entre 70 a 80 ppm): para evitar gérmenes, bacterias y lograr que la piscina mantenga su estado saludable y de limpieza.
- Niveles de pH adecuados (entre 7.2 y 7.8): es esencial medir los niveles de pH en el proceso de mantenimiento de piscinas de agua salada porque este nivel nos ayudará a evitar la irritación de la piel y los ojos.
Consejos para el mantenimiento de piscinas de agua salada
Además de añadir y controlar los productos químicos necesarios para el mantenimiento de piscinas de agua salada, tendrás que controlar otros aspectos relacionados con estos. Desde Abrisol, como profesionales de las piscinas, te daremos algunos consejos para que puedas mantener una piscina de agua salada cristalina y en perfectas condiciones.
- Controlar el pH: Si tienes un controlador automático, obtendrás el nivel exacto de pH, sin necesidad de realizar un control diario. En caso de que tengas que hacerlo manualmente, se requiere un control diario de estos valores, que deben ser superiores a 7, como mencionamos anteriormente. Si, por el contrario, el valor es inferior a 7, el estado del electrodo de clorador salino empeorará en menor tiempo.
- Controlar el nivel de sal: Deberás añadir, cada tanto, cierta cantidad de sal a la piscina, pero esto no será necesario que se repita muy a menudo, ya que la sal no se evapora ni se reduce fácilmente y, por ende, durará más tiempo en el agua. De hecho, son las personas las que se llevan la sal en su cuerpo al salir de la piscina.
- Controlar la temperatura: El agua necesita estar a 15 grados centígrados para que se produzca el hipoclorito sódico.
- Controlar el cloro gaseoso: Es necesario estar al tanto de la cantidad de cloro gaseoso que presenta el agua. En caso de que se haga manualmente, se debe realizar a diario. La mejor opción es conseguir una sonda ORP, que genera la cantidad indicada de cloro gaseoso automáticamente.
- Limpieza profunda: Luego de tener bajo control todos los ítems mencionados anteriormente, tendrás que limpiar la piscina de agua salada como si fuese cualquier otra piscina, es decir, limpiar las hojas, ramas o insectos que se hayan acumulado en cada uno de los skimmers. A esto, deberás sumarle la limpieza con el limpiafondos.
DATO: La frecuencia de esta limpieza general varía según la ubicación de la piscina, ya que, por ejemplo, si se encuentra al aire libre, requerirá una limpieza más frecuente y profunda que una piscina interna.
Recent Comments